El arte que sale a la calle
El arte urbano, o como muchos le dicen street art, es esa expresión que se sale del cuadro y del museo pa’ tomarse la calle.
Nació por allá a finales de los 60, cuando unos pelados en Nueva York se cansaron de no ser escuchados y empezaron a llenar los muros del metro con su firma, con rabia, con sueños y con ganas de decir algo.
A diferencia del arte tradicional, este no pide permiso ni busca aplausos: solo quiere ser visto, su fuerza está en eso, en que cualquiera puede encontrarse con él caminando por el barrio, en que le cambia el ritmo visual a la ciudad y en que cada obra tiene algo pa’ decir.
El arte urbano es calle, voz, identidad… y sobre todo, una forma de recordarnos que el color también es resistencia.
Características
Los muros, los puentes y hasta las fachadas viejas se vuelven escenario pa’ crear.
El arte urbano no es solo bonito: habla, denuncia, celebra.
Muchos murales no duran mucho: el sol, la lluvia o un nuevo artista los cambian.
Acá no hay distancia entre el que pinta y el que mira.
Spray, esténcil, brocha, rodillo, stickers, collage o hasta arte digital.
Nada está planeado del todo. El arte urbano nace de la improvisación, del momento y del corazón.